Siguiendo el compromiso de la Orden de Agustinos Recoletos con la protección del menor y la creación de entornos seguros en sus ministerios, varios religiosos y miembros de la familia agustino recoleta participan en el Seminario sobre la Prevención del Abuso en Venezuela.
El encuentro inició la mañana del jueves 27 de febrero, en el Aula Magna de la Universidad católica “Andrés Bello” de Caracas, bajo el lema: “La Iglesia, un lugar seguro. Compromiso y responsabilidad de todos”, promovido por la Conferencia Venezolana de Religiosos y Religiosas (CONVER), el Centro de investigación y formación interdisciplinar para la protección del menor (CEPROME), la Confederación Latinoamericana de Religiosos (CLAR) y la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV).
La apertura del seminario estuvo a cargo de Fray Eddy Omar Polo (OAR), presidente de la CONVER y de ARCORES Venezuela, quien hizo énfasis en la importancia de cuidar las ovejas de Cristo.
Fray Antonio Carrón (OAR) presidente de ARCORES Internacional también dijo presente a este encuentro, con la ponencia titulada “El abuso en las instituciones educativas, deportivas y contexto digital”, señalando los espacios en los que el abuso pude presentarse de forma común y cómo prevenirlo a tiempo.
Además de esta ponencia, Fray Antonio Carrón, quien es miembro del Center for Child Protection de OMA y de la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores, abordará temas como la cultura del buen trato, experiencias significativas, retos pastorales y espirituales para América Latina en el tema de la prevención.
El sacerdote mexicano Daniel Portillo, quien es miembro de la Comisión de Protección del Menor de la Orden de Agustinos Recoletos, es otro de los participantes que preside el seminario.
Durante este encuentro que finalizará el sábado 29 de febrero, se abordarán tres ejes temáticos: El abuso en la Iglesia y en Latinoamérica, el abordaje del abuso y la reforma eclesial latinoamericana frente a este tema, y la prevención del mismo.
Todo ello con la finalidad de fomentar en Venezuela la prevención del abuso de poder, de conciencia y el abuso sexual contra niños, niñas, adolescentes y adultos vulnerables, consolidando la Iglesia como lugar seguro.