El 27 de agosto de 1994, abría sus puertas el dispensario de la capilla Virgen de Fátima, de la parroquia de Nuestra Señora de la Consolación, en Chiclayo. Con varias décadas de funcionamiento, este espacio ofrece actualmente servicios de odontología, pediatría, otorrinolaringología y medicina general. Asimismo, cuenta con una pequeña farmacia, que suministra medicamentos obtenidos de donaciones. Mas, debido a la crisis del coronavirus, el dispensario ha debido ser cerrado, con que las 40 personas que se beneficiaban de sus servicios no pueden seguir haciéndolo, por el momento.
El equipo del centro está formado por el doctor Walter Díaz Silva, coordinador, gerente y médico; una persona en enfermería y tres facultativos que trabajan de forma voluntaria. El dispensario abre los lunes, miércoles y viernes, de 4 a 6 de la tarde.
Reflexión
Asistimos a tiempos de cambios rápidos y de nuevos retos para la humanidad. Estamos inmersos en una crisis económica, sanitaria y espiritual. La realidad actual nos invita a descubrir el rostro de Cristo en cada uno de nuestros hermanos enfermos que necesitan de nuestra solidaridad, especialmente a los que somos seguidores de Cristo y estamos comprometidos con la construcción de una nueva humanidad. Las enfermedades nos afectan a todos, siendo un desafío para los que queremos construir una humanidad más justa, fraterna y solidaria. La realidad actual nos coloca en la escuela del desprendimiento y de la sensibilidad ante las necesidades de los otros. La escucha es un bálsamo precioso para muchas personas que viven en la soledad y con angustia.
