Julia y Fernando terminan su voluntariado en Guamote, Ecuador, y aquí nos cuentan la última semana.
Jueves, 27 de julio. Mercado y planificación
Los jueves han sido días tranquilos. Es el día del mercado en Guamote, famoso no solo en la región del Chimborazo, sino reconocido en todo Ecuador. Viene gente de todas las comunidades y las hermanas tienen que atender el despacho parroquial por la mañana y la tarde.
Es un día en el que nos dedicamos a preparar las actividades del día siguiente. Julia no solo preparó los huesitos para las chicas de las becas, sino que invitó a la comunidad a hornado (cerdo asado).
Viernes, 28 de julio. Última gran actividad
La hermana Irma y María Lorenza habían citado a todas las chicas que están recibiendo beca escolar. El encuentro duró un poco más de dos horas. Primero, recibieron un taller de sensibilización sobre la importancia de los estudios.
Después, ellas escribieron unas cartas de agradecimiento a ARCORES y pidieron a Julia y a Fernando que las entregaran. En el acto de entrega de las cartas, hubo una pequeña sorpresa, pues las guardaron en dos mochilas que nos regalaron con recuerdo y agradecimiento.
La actividad terminó con la entrega de las becas del mes de julio y compartiendo una agüita de limón y los huesitos que, con tanto cariño, había preparado Julia. También estuvo la mamá con la niña de los zapatitos. La última vez, Julia la había visto con la carita muy seca y agrietada. Aprovechó la ocasión para regalarles una cajita de crema y explicar a su madre cómo cuidarle la piel.
Por la tarde, comenzaron las fiestas de Guamote con el pregón. Todos esperábamos un discurso inaugural del alcalde, cuando nos encontramos que era todo un desfile de grupos y asociaciones vestidos con trajes regionales y bailando sin parar. Una grata y vistosa sorpresa.
Sábado, 29 de julio. Sacramentos
Día de celebración de sacramentos. A las 10 de la mañana, una boda y el bautizo de los dos hijos de los novios en Pull Quishuar. A las 12, bautismo en Tejar Balbaneda.
Nos llaman la atención los ritos indígenas que realizan antes y durante los sacramentos. Además de la tradicional limpia, también tienen un rito de perdón de los novios a los padres y padrinos por su vida pasada, y de los padres del bautizado al bautizado. Al bautizado también simulan coserle la boca como símbolo de que la cierra para la maldad y solo va a bendecir.
A los novios les ponen un manto que les cubre la cabeza y los unen como símbolo de la alianza. También les regalan un azadón y lana de oveja como símbolo de sus trabajos y responsabilidades.
Por la tarde, Julia preparó unas ricas natillas para llevar a la comida de despedida del domingo. Terminamos yendo a ver la fiesta de elección de la Reina de las Fiestas del Cantón Guamote 2023.
Domingo, 30 de julio. Eventos finales
Un día cargado de eventos y actividades múltiples. Comenzamos con la eucaristía dominical. Una celebración especial, no solo por ser la última, sino porque era el cumpleaños del padre Wilo, jesuita que presidió la celebración y coordinador de varias actividades parroquiales.
Siguiendo con los festejos guamoteños, asistimos a las 11 de la mañana al festival intercultural donde se eligió a la Sumak Warmi 2023, es decir, a la reina indígena de las comunidades. Todo un festival de sonido, color y tradiciones.
Ese día almorzamos en casa de Carmita, trabajadora del proyecto ARCORES y muy afín a la parroquia y a las hermanas. Su hija Fiorela, que también acompaña a las hermanas en la visita a las comunidades, preparó un rico pescado encebollado.
Después, por la tarde, asistimos a la inauguración de “Tupu Café”. Es un proyecto de la Fundación Acción Integral Guamote, de los jesuitas. La finalidad de este espacio de encuentro basado en tradiciones y elementos guamoteños es ser un punto de comercialización de más de 25 productos locales, además de prestar un pequeño servicio de cafetería.
Lunes, 31 de julio. El regreso
Comienza el regreso. Viaje a Quito, donde nos esperaba la hermana Maruja en el colegio Virgen del Consuelo, con una última parada turística en la Mitad del Mundo, lugar ecuatoriano emblemático por poder pisar los dos hemisferios.
Como resumen del mes del voluntariado, recogemos las palabras que Julia ha repetido a todos en sus despedidas: “Os llevaré siempre en el corazón, no os olvidaré nunca y siempre que pueda os ayudaré. Ha sido una experiencia inolvidable. Un sueño hecho realidad”.