El pasado 12 de julio, el hermano Jaazeal Jakolasem participó en el coloquio “Fe sin fronteras” que REDES, plataforma a la que ARCORES pertenece, y Justice Coalition of Religious organizaron dentro del programa oficial del Foro Político de Alto Nivel de la ONU. El hermano Jaazeal presentó en este evento el proyecto de las Panaderías de la Bondad de Filipinas. El encuentro, celebrado en línea, contó con más de 130 participantes de muy diversas geografías y se pudo seguir en francés, inglés y español.
Las Panaderías de la Bondad de ARCORES están elaborando pan para las personas afectadas por la crisis del covid-19. La gente puede disponer de productos de panadería en las Estaciones de la Bondad de ARCORES; el pan también se distribuye a las comunidades remotas.
Pan y EPIs
Nuestra primera Panadería de la Bondad fue puesta en marcha por las monjas agustinas recoletas del monasterio de clausura de San Ezequiel Moreno de Bacólod, que participaron activamente en nuestras iniciativas de respuesta a la covid. Al comienzo del bloqueo fabricaron EPIs (mascarillas y batas médicas) para el personal de primera línea y la gente en su taller de confección. Posteriormente, establecieron una Panadería de la Bondad para participar en el trabajo de solidaridad, horneando y distribuyendo pan a las comunidades pobres, para los hospitales, los centros policiales y para las áreas involucradas en el monitoreo de la covid.
Otra Panadería de la Bondad nació en Minglanilla, Cebú, donde los agustinos recoletos, la comunidad franciscana, los agustinos descalzos y otros socios establecieron la panadería de la bondad ARCORES que sirve a la isla de Cebú. Nuestras Panadería de la Bondad se mantuvo continuamente en esta pandemia, y apoyamos a grupos eclesiásticos, centros de acción social e iniciativas locales con sus programas de apoyo a las familias durante la crisis.
Las Panaderías de la Bondad es una de las iniciativas que pueden abordar de forma sostenible el problema del hambre incluso más allá de la crisis de covid-19. Durante la crisis del covid, hay carestía de alimentos, lo que provoca hambre. Para octubre de 2021, estableceremos otras dos panaderías de bondad en Balamban – Cebú y Resource Handumanan – Bacolod, replicando los actos de bondad sostenibles.
De la panadería a la cocina
La cocina St. Ezekiel’s Charity, apoyada por ARCORES, también nació para abordar los problemas de hambre en un barrio urbano de Quezon City. Actualmente, distribuye 200 platos al día para 200 personas, entre las que se encuentran ancianos, jóvenes desempleados y padres sin trabajo, y niños y madres desnutridos, que viven junto al arroyo y bajo el puente en Quezon City.
En 2020 también se desarrollaron, en Filipinas, Despensas Comunitarias, un carro o mesa de alimentos con productos enlatados, verduras, paquetes de arroz y otros artículos alimenticios. Estos espacios están montados a lo largo de la calle, donde la gente puede simplemente tomar lo que necesita y otros pueden dejar sus donaciones. Esta iniciativa de modelo comunitario genera un impulso de solidaridad en todo el país.
La Despensa Comunitaria es una alternativa replicable para hacer frente a la necesidad de alimentos durante la pandemia. Lo bueno de este modelo es que no solo ARCORES lo está haciendo, sino que la propia gente está aportando su cuota e incluso ha establecido sus propias iniciativas comunitarias.
Estos programas solidarios de asistencia alimentaria se llevan a cabo en zonas de bloqueo y en comunidades insulares, donde la ayuda del gobierno no llega. Nuestro trabajo de solidaridad nos desafía a estar en las periferias, sin fronteras. Como dice el Papa Francisco: “La solidaridad nos ayuda a ver al otro —entendido como persona o, en sentido más amplio, como pueblo o nación— no como una estadística, o un medio para ser explotado y luego desechado cuando ya no es útil, sino como nuestro prójimo, compañero de camino, llamado a participar, como nosotros, en el banquete de la vida al que todos están invitados igualmente por Dios”. (Mensaje de la 54ª Jornada Mundial de la Paz 2021)