El equipo de ARCORES México ha concluido y entregado la primera de las casas que reconstruirá para los afectados por el terremoto de septiembre de 2017 en Totolapan (Estado Morelos)
El 19 de septiembre de 2017 la casa de Inocencio Gloria Zamora estaba en pie. Minutos después del sismo que hizo temblar el centro de México, su casa en Totolapan (Estado Morelos) era tan solo escombros y ruinas. “Cuando llegué, la casa estaba abajo”, recuerda su hijo Leonardo. “Siento pena porque fue un accidente, pero no pudimos recuperar nada”, recuerda.
Desde entonces, Leonardo, de edad avanzada y enfermo con un dedo del pie gangrenado, se vio obligado a vivir en condiciones infrahumanas. En el espacio donde antes estaba su casa, su hijo solo pudo construirle una pequeña habitación con cartones y chapas. El aseo, tan importante por su enfermedad, tenía unas condiciones higiénicas paupérrimas.
El Gobierno del Estado de Morelos no le incluyó en su plan de ayuda. Según indica Mario Pérez, uno de los vecinos del municipio que ha ejercido de mediador entre los afectados y la autoridad, “los hijos de Inocencio no sabían leer ni escribir”. Por ello, se sintieron asustados y no completaron los procedimientos legales para reclamar la ayuda del Gobierno.
En su plan de reconstrucción, ARCORES México colocó a Inocencio como una prioridad debido a su delicada situación. Así, hace apenas unos meses se comenzó la construcción de una pequeña casa con un aseo, dentro del terreno propio de este vecino. “Era urgente construirle un lugar cómodo donde pudiera vivir y un baño”, cuenta Gustavo Rojas, arquitecto y miembro del equipo de ARCORES en el país. La construcción realizada es pequeña, ya que se espera que se pueda ampliar en los próximos meses con otras dependencias. No obstante, es un gran paso para la vida de Inocencio.
El sábado 8 de diciembre, ARCORES México hizo entrega de la vivienda, una vez concluida su construcción. Leonardo Gloria, que desde ahora vivirá con su padre, firmó el acta de entrega de la casa. Es la primera de las diez casas que la Red Solidaria Internacional tiene planeado reconstruir en el municipio de Totolapan.