Georgene Quilaton-Tambiga, ARCORES Filipinas
Familia Agustina Recoleta
El Colegio Santo Tomás, miembro de ARCORES Filipinas, entregó hoy al Colegio de Sta. Rita de San Carlos (CSR) un donativo en metálico por valor de 35.000 pesos filipinos.
La ayuda para los del Santa Rita se recogió durante la misa del día de la fiesta en honor de San Ezequiel Díaz Moreno (anticipada) el pasado 18 de agosto. Los tomasianos, incluidos alumnos, padres, profesores, personal y administradores reunieron sus recursos para la familia del Santa Rita.
La Hna. Marcela Dela Cruz, AR, superiora de la comunidad y directora, expresa su gratitud a todos los que acudieron en su ayuda en momentos tan difíciles. Foto de ARCORES Filipinas
La hermana Marcela Dela Cruz, AR, superiora de la comunidad CSR y directora, y la Hna. Teresita Diana, AR, directora de la escuela, aceptaron la donación entregada en el edificio del Departamento de Educación Básica CSR en Barangay I, San Carlos City.
«Los milagros ocurren de verdad»
La Hna. Diana contó a los tomasianos cómo la milagrosa imagen de Santa Rita de Casia, cuyo rostro es de marfil, resistió el fuego. El Sagrario y las Sagradas Hostias con los ornamentos sagrados también se salvaron y permanecieron intactos incluso cuando los bomberos lucharon durante casi cinco horas para contener el fuego que envolvió toda la capilla.
Por su parte, la hna. Dela Cruz explicó que la comunidad de la ciudad de San Carlos ha sido muy generosa con las hermanas agustinas recoletas y la comunidad de Santa Rita, proporcionando alimentos y ropa básica especialmente a los 12 escolares que perdieron todas sus pertenencias físicas.
Miembros del profesorado y del personal de los departamentos de Educación Básica y Universitaria del Santo Tomás con los recién elegidos miembros del Consejo Supremo de Estudiantes posan con la Hna. Diana y la Hna. Dela Cruz. Foto de ARCORES Filipinas
Cabe recordar que un incendio arrasó el edificio principal del Colegio Santa Rita el pasado 14 de agosto. La capilla Santa Rita, la biblioteca del colegio, el laboratorio de informática, la oficina de contabilidad, las aulas y otros laboratorios del colegio fueron algunas de las instalaciones destruidas.
