La familia agustino recoleta lleva trabajando por el saneamiento en esta región de Perú desde hace más de 25 años
“El agua libre de impurezas y accesible para todos es parte esencial del mundo en que queremos vivir”. El Objetivo 6 de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas apresura a todos los ciudadanos para trabajar por un acceso universal al agua. Según sus datos, en 30 años probablemente un cuarto de la población viva en escasez de agua. En su empeño por trabajar por el agua limpia y el saneamiento, ARCORES y las organizaciones que forman parte de la red llevan trabajando más de dos décadas para que las personas más vulnerables, que son las que sufren las consecuencias de este grave problema, tengan la posibilidad de acceder al agua limpia y potable.
En la región peruana de Chota, donde las desigualdades en la sociedad son notables, la familia agustino recoleta ha realizado un gran trabajo para que las comunidades campesinas puedan tener agua en sus casas y en sus campos, para su higiene y su substencia. Desde 1992 se han realizado un total de 70 proyectos de abastecimiento de agua y saneamiento que han favorecido a miles de personas de la comarca andina.
Lingán Alta, Bellandina, Utchuclachulit, La Colpa, Bellavista o Surumayo. Son algunas de las 111 comunidades rurales a las que antes Haren Alde y ahora ARCORES ha ayudado con la realización de los proyectos que han permitido que estas poblaciones, donde apenas hay infraestructuras básicas, puedan tener un acceso a agua saludable con la creación de sistemas de agua o letrinas para un mejor saneamiento.
En la comarca de Chota se han invertido cerca de 14 millones de euros gracias a los fondos propios provenientes de donantes y socios y a la colaboración económica de 16 financiadores públicos e instituciones que han permitido el trabajo de la familia agustino recoleta contra las desigualdades y a favor de un agua accesible para todo el mundo.