Fortaleza Capacita
El Programa Fortaleza Capacita está gestionado por la Concejalía de Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Fortaleza (Ceará, Brasil) y ofrece cursos gratuitos a personas mayores de edad que quieren ser emprendedores y cuentan con algunas ideas para montar pequeños negocios propios para el sostenimiento de sus familias.
Para que las habitantes del barrio de Jangurussu, donde se sitúa el Centro Psicolosocial San Agustín (CAPSA) de los Agustinos Recoletos, tuvieran acceso fácil a estos cursos, se ha firmado un convenio con duración de una año para que estos cursos estén disponibles y cercanos para sus beneficiarios.
50 beneficiarias
En concreto, han sido ya 50 beneficiarias las que han recibido estos cursos durante el mes de octubre, todos ellos dentro de la Primera Etapa de Cualificación Profesional. Entre los asuntos que se tratan está marketing digital y el uso de nuevas tecnologías y redes sociales para negocios locales, la gestión de precios, la gestión financiera, la gestión empresarial, algunas técnicas de venta, elaboración de propuestas de negocio…
Los cursos tienen una carga horaria de entre 8 y 12 horas, son totalmente gratuitos y añaden un espacio de asesoría práctica para que estas mujeres puedan poner en marcha sus propias fuentes de renta.
Acuerdo con el Hogar Santa Mónica
El CAPSA es una de las iniciativas sociales de los Agustinos Recoletos en Fortaleza, y tiene relación con otras instituciones como el Hogar Santa Mónica, un centro de acogida de niñas y adolescentes que han sufrido agresiones, abandono, o cualquier tipo de violencia. El objetivo del CAPSA es la prevención: que ninguna niña o adolescente tenga que pasar por esas agresiones.
Para conseguirlo, la mejor manera es romper la espiral de la pobreza y el círculo vicioso de la exclusión social de estas familias, en muchos casos monoparentales, con una mujer al frente que, en su juventud, también ha sufrido algún tipo de abuso. Se les otorgan herramientas para mantener una vida autónoma, libre, digna y sin carencias graves permite romper con la exclusión y evitar que las nuevas generaciones tengan que transitar por los mismos caminos de abuso, explotación o sumisión.