Este centro penitenciario filipino tiene 356 reclusas. Algunas solicitaron a la dirección medios para elaborar dulces y luego quisieron formarse en panadería y repostería.
Encontraron eco en los voluntarios de la Universidad San José de los Agustinos Recoletos en Cebú, que visitaban regularmente la cárcel. La petición fue así recogida por Instituto de Educación no Formal y de Programas de desarrollo comunitario de este centro universitario.
Se ha diseñado un curso de 140 horas y se ha conseguido de las autoridades la acreditación oficial del curso. El curso es impartido por profesores del Centro de formación Industrial y tecnológico de la universidad. Treinta reclusas han obtenido el título oficial que las acredita como panaderas y reposteras, y les proporciona una oportunidad de empleo cuando recuperen la libertad.
En la actualidad se prepara la segunda edición; y se ha incluido en el programa de reinserción social y laboral de las mujeres reclusas.
ORACIÓN
Dios omnipotente y misericordioso, sólo tú conoces lo más secreto del corazón de los hombres, sólo tú sabes quién es justo y puedes justificar al malvado escucha nuestros ruegos por tus hijos encarcelados; que encuentren alivio de sus penas en la paciencia y en la esperanza y puedan retornar cuanto antes, sin obstáculo alguno, a sus propias familias.
Por Jesucristo nuestro Señor.
El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para llevar la Buena Noticia a los pobres. Me ha enviado a proclamar que los cautivos serán liberados, que los ciegos verán, que los oprimidos serán puestos en libertad (Lc 4,18)